Productoras de leche sancionadas en Colombia por engaño al consumidor

Cuatro empresas lecheras en Colombia fueron sancionadas por la Superintendencia de Industria y Comercio por adulterar la leche con lactosuero, afectando la transparencia del mercado.

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La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) sancionó a cuatro reconocidas empresas productoras de leche en Colombia por prácticas engañosas en la comercialización de sus productos. Según la resolución No. 4168 de 2025, las compañías Gloria, Lactalis, Hacienda San Mateo y Sabanalac habrían presentado como leche entera higienizada (UAT) un producto alterado con lactosuero. Esta práctica, según la SIC, indujo a error a los consumidores, quienes no contaban con los medios para detectar la presencia de esta sustancia en el producto adquirido.

Los resultados de las pruebas realizadas por el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) fueron determinantes para establecer la infracción. Se encontraron niveles elevados de Caseinomacropéptido (CMP) en varias marcas comercializadas por las empresas sancionadas, entre ellas Medalla de Oro, Máxima, Algarra, De la Cuesta, Alkosto Hiperahorro, Parmalat, Latti y Pomar. Estos hallazgos confirmaron la adición de lactosuero a la leche cruda, lo que representa una violación a la normatividad vigente en el país.

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Ventaja competitiva indebida y afectación al mercado

La Superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque, explicó que esta práctica otorgó a las compañías infractoras una ventaja competitiva indebida. Al reducir los costos de producción mediante el uso de lactosuero en lugar de leche cruda, pudieron vender sus productos al mismo precio que la competencia, incrementando su margen de ganancia o reduciendo los precios para captar mayores volúmenes de venta. Esta estrategia afectó negativamente a los productores que respetaron la regulación.

Los indicios económicos recopilados por la SIC respaldan la sanción. Se evidenció la presencia de lactosuero en los inventarios de las empresas investigadas, sin que se justificara su uso en productos distintos a la leche. Además, se identificaron menores costos en los insumos utilizados por las compañías sancionadas en comparación con otras empresas del sector, lo que sugiere el uso de materias primas más económicas para reducir costos de producción.

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Marcas afectadas por la presencia de lactosuero

En el caso de Gloria y Hacienda San Mateo, propietarias de las marcas Algarra y De la Cuesta, respectivamente, las pruebas del Invima confirmaron la presencia de CMP en niveles elevados. Lactalis también presentó altos niveles de CMP y otras irregularidades económicas. Por su parte, Sabanalac, fabricante de los productos Pomar, fue sancionada por la presencia de CMP en su leche, aunque la SIC no encontró pruebas concluyentes de que esta empresa hubiera obtenido una ventaja competitiva por la infracción.

La medida tomada por la SIC busca proteger a los consumidores y garantizar que los productos lácteos cumplan con los estándares de calidad establecidos por la regulación. La adulteración de la leche con lactosuero no solo afecta la transparencia del mercado, sino que también impacta la confianza del consumidor en las marcas involucradas.

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Las compañías sancionadas tienen la posibilidad de interponer un recurso de reposición ante la Superintendente de Industria y Comercio. Mientras tanto, la decisión se encuentra en proceso de notificación y podría derivar en nuevas acciones regulatorias en el sector lácteo.

Este escándalo ha puesto en alerta a los consumidores colombianos, quienes ahora exigen mayor control sobre la calidad de los productos lácteos. La SIC hace un llamado a la ciudadanía para que denuncie cualquier irregularidad en la comercialización de alimentos y reitera su compromiso con la defensa de los derechos de los consumidores en Colombia.