¿Cómo tener un momento espléndido con su café matutino sin sacrificar su sabor?

Utilizar opciones alternas al azúcar puede ser el cambio necesario para una experiencia de café más auténtica y de paso, comenzar una nueva etapa enfocada en la salud.

Hay algo inexplicablemente reconfortante en el primer sorbo de café de la mañana. Para muchos, tomar una taza de esta bebida es un ritual para saludar al sol y afrontar las actividades diarias. Sin embargo, por mucho que guste ese pequeño placer matutino, es importante concientizarse sobre la cantidad de azúcar que se añade y su repercusión en la salud.

Lo cierto es que cambiar a un café “menos dulce” no significa renunciar al sabor que tanto lo caracteriza. Por el contrario, puede abrir todo un nuevo mundo de experiencias cafeteras. Es más, para aquellos que han decidido adoptar un estilo de vida saludable, se comparten cinco motivos por los que consumir alternativas al azúcar en el café hará que las mañanas sean más espléndidas:

1. Se adentrará a las alternativas. Si alguna vez se ha escuchado sobre los sustitutos del azúcar, es imposible no pensar en nombres como el de Splenda®, la marca de endulzantes bajos en calorías más reconocida del mundo. Con estos productos, la verdadera victoria es que, por su dulzor, se evita sacrificar el sabor del café. El portafolio de Splenda® es versátil, por lo que puede ser utilizada no solo en el café mañanero, sino también en una amplia variedad de recetas y alimentos, desde postres o bebidas, hasta platos principales.
2. Mejorar el autocontrol. Al disminuir el consumo de azúcar en la bebida caliente, se podrá fortalecer la disciplina, que a su vez influye de manera positiva en otras decisiones conscientes. Esta transición puede servir como un recordatorio constante del compromiso con el bienestar.
3. Cultivar el mindfulness tempranero. Es una oportunidad para conectarse con uno mismo, apreciar las alegrías más simples y comenzar el día de una manera más consciente. Además, se notará que, con el tiempo, las papilas se adaptan y empiezan a disfrutar sabores que antes pasaban desapercibidos (como el de los sustitutos), brindando unos minutos extra de indulgencia.
4. La sensación de éxito. En el corto plazo, transitar a un café con alternativas al azúcar puede fomentar un sentimiento de que se van cumpliendo pequeñas, pero significativas metas. Cada taza será como una victoria en el camino hacia prácticas más saludables para tener una mejor versión de uno mismo.
5. Volverse un experto. Con estos cambios, además se podrá desarrollar un sexto sentido de “barista” para saber si el grano de café es arábica o robusta. Es probable que se tome del mismo tipo de café, pero surgirá curiosidad por saber en qué se diferencia el colombiano del brasileño o por qué las cosechas de países como Cuba son tan populares.

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Las elecciones que se hacen a diario forman parte de los ingredientes para ser más felices. Así que es importante permitirse disfrutar de esos momentos simples, que hacen que la vida sea más “dulce”, sin remordimientos ni culpas. Tomar como ejemplo la lección de Splenda®, cuya principal virtud es mostrar que el sabor puede conservarse.